Un lugar acogedor y hermoso donde algunos sacerdotes de edad, van a culminar sus vidas.
Me pareció un hogar muy lindo y organizado y más que cómodo para aquellos servidores de la iglesia que deciden terminar su vida de manera cómoda y con buena atención, eso sí, si tiene cómo pagar la mensualidad que ronda los 2 millones de pesos