La comida es deliciosa. Las empanadas y las arepas son las mejores del sector, y me atrevo a decir, de Bogotá. Desafortunadamente, su servicio de domicilios es malisimo. Ninguno de los números proporcionados funciona o bien, no contestan. Sumado a ello, los envíos siempre demoran más de 45 minutos. Enamoran con sus sabores, pero el solo pensar en tratar de hacer un pedido, baja muchísimo la calidad. Hay que mejorar mucho en ese aspecto.