Todo espectacular en el Glamping, las instalaciones, la acomodación, la misma estructura de las cabañas que hace sintonia con la naturaleza del lugar, todo es perfecto, incluso puedes pensar que por estar al lado del lago tus mejores amigos serán los mosquitos o zancudos pero para tu grata sorpresa, no hay! Es lo máximo, el clima aunque cálido siempre fresco por la brisa tan espectacular y la sombra de los arboles. El baño al aire libre que te da una sensación única de bienestar. Y ni hablar de los anfitriones, Marisol, sus hijos y Javier excelentes personas que siempre están atentas a lo que requieras y darte recomendaciones. El desayuno, el mejor, super completo, te consienten con lo que gustes con variedad de frutas y otras delicias. Muy agradecida por la fortuna de haber conocido este paraíso en la tierra, espero volver muy pero muy pronto. Son los mejores!