Es un sitio de adoración a Dios donde con una ceremonia muy peculiar y un sacerdote lleno del espíritu Santo se puede cambiar la tristeza por alegría, la desilusión por esperanza y la falta de fe por el deseo de regresar. Es una bonita iglesia para congregarse
Amo a Dios y soy católica pero a mi parecer el párroco tiene es negocio con la parroquia como es posible que cobre $130.000 por colocar unas cenisas al frente del atrio fuera de lo que cobra por la misa que tristeza