La mazorca fría y cruda, las papas viejas, carne muy dura. El lugar tiene un gran espacio verde pero la comida no es recomendable. Se lo hice saber al encargado pero no dijo nada.
Lo único bueno de este lugar es la vista. La comida, muy regular: el ajiaco era como caldo de papa y frío; la carne de cerdo nos salió cruda y la arepa de choclo, no sabía a mazorca
- Se demoran dos horas en servir. - Atención muy mala, tras que se demora el servicio, quien entrega la comida esta de muy mal genio y se le olvida parte del pedido. - Sabor de la comida insípido, solo la carne tenia buen sabor. No lo recomiendo. Hay mejores opciones en la zona.
Parqueadero amplio, zonas verdes muy bonitas lugar ameno para compartir con familia y amigos canchas de tejo, rana, voleibol, caballos cabalgata, cuatrimotos Lo recomiendo
Para el precio que tiene la comida, muy muy malo. La carne súper gruesa y cruda Papá criolla dura Jugo solo agua Aji solo agua La ensalada literal (media hoja de lechuga y un pedazo de tomate) Lo único que rescató es la morcilla.
Le deberían invertir al sitio, así como reciben, debería estar mejor arreglado. Sillas oxidadas Y los caballos súper flacos, que tristeza.
Excelente vista, buen precio y aunque es autoservicio los encargados te hacen sentir bien. Juan Carlos el administrador me ayudó cuando dejé mis gafas en mi última visita.
Ofrecen el domingo 22 mayo, cuchuco con espinazo, a las 12 pm. Luego de 40 minutos dicen que no hay. Pedimos trucha. Dicen que no. Que nos aconsejan carne a la parrilla, que sale más rápido. Cómo es posible que no caigan en cuenta que para clientes de 80 años les ofrezca carne, sino tienen dientes. En relación, a los acompañamientos un desconocimiento total. Antes de la pandemia y post pandemia, siguen igual. Toca ir allá porque no hay restaurantes que le hagan competencia.
La picada para 4 personas es muy pequeña para el precio que se paga y debido a las lluvias hay demasiado barro tema al cual no le hacen mantenimiento o por lo menos un control para que el cliente se sienta cómodo.
Sitio recomendado para una picada de almuerzo de domingo, espacios suficientes tanto al aire libre, como cubierto. No es un restaurante gourmet, pero los alimentos están muy bien preparados. El costo nos pareció económico comparado con negocios de sitios cercanos. Ideal para ir con niños pequeños.
No nos gusto nada el almuerzo, fuimos tal ves los primeros en llegar y nos sirvieron recalentado y viejo.el precio esta normal. $ 125.000 para 4 personas incluyendo bebidas.la atencion esta bien pero en definitiva la comida no es nada buena nos indispuso a los 4 y terminamos dandosela a un
Compré el cupón por Cuponatic. Este lugar es muy agradable nos atendieron muy bien la cajera el mesero y en general, pasamos a una cabalgata la cual fue muy corta duro como 20 minutos lo bueno fue que las personas fueron atentas y al final nos tomaron fotos con los caballos, después pasamos a almorzar una comida muy exquisita me gustó y el postre también rico lo único regular fue el tiempo de la cabalgata de resto muy bien.
Muy rico todo, el contacto con la natureza es increíble, la atención muy buena. Lo único fue que no nos dieron el postre que iba incluido en la compra del cupón.
El estado de los baños, aunque están aparentemente en reparación, es lamentable y no hay sanitario para cambiar bebés, que cuando el lugar es familiar, es esencial y no lo digo por mí, tuve que ver varios padres frustrados por el tema de los baños
Lo único bueno es la vista TAN PRIVILEGIADA que tienen. Decidimos parar a almorzar y la experiencia no fue buena. Aunque todos fueron muy amables con nosotros la infraestructura del lugar es pésima: las mesas están que se caen y sucias, los baños sucios y no sueltan y tienen una zona infantil.la cual cobran $10.000 / 20 minutos o $20.0000 / todo el día (a parte que ya estás consumiendo en el establecimiento). Al final todo eso es hasta pasable, pero qué la comida no sea buena? Eso sí no. Las carnes estaban secas y sobre cocinadas parecían hechas muy temprano o incluso de otro día y las morcillas ni se diga. Las papás amarillas, que no tienen pierde, estaban deliciosas. La sensación final es que el sitio es una malísima y mediocre copia de "El Tambor" restaurante más adelante via la Calera- Bogotá. NO VOLVERÍA, NO LO RECOMIENDO.
Súper bueno, rica la comida, limpio, muy buen servicio, todo el personal muy atento, rápida la atención y la comida es igual de buena que la de El Tambor y quedan como a 500 metros.