Nos proporcionaron un menú y después de recibir comida, dejaron el menú y nunca volvieron a tomar nuestro pedido.
La botella de vino blanco era caliente no fria y no podían proporcionar una factura porque el vino caliente que vendían no estaba en su sistema.
Finalmente, quieren cobrar precios como si fueran un establecimiento de alta cocina en Bogotá pero no pudieron recibir una American Express ni Visa. Solo MasterCard o efectivo y sin factura.
El restaurante Burgess es una propuesta nueva, bastante lujosa y por supuesto costosa, la atención en el sitio es de primera calidad, los meseros son muy atentos y la preparación que tienen es admirable, la comida es buena pero el precio es elevado para lo que realmente ofrece en sabor y presentación.
Excelente comida. Variada y deliciosa. Ambiente muy agradable y elegante. Precios justos, aunque los cocteles son muy costosos para el tamaño y el poco licor que tienen. Parecen mas bebidas refrescantes. No hay menú impreso ni para escanear. No todas las personas tienen instagram para poder acceder al menú, lo cual complica bastante la selección de alimentos.
El lugar es muy bonito, incluso mas bonito que el burgess original, pero lamentablemente la comida si esta por lejos de ser buena, pensaría que es mas bien regular a mala, lo que sirven se ve simple y poco original, a diferencia de sus otros puntos no venden hamburguesas o bueno solo un par, y realmente pensamos que seria mejor, no recomendaría ir en familia el ambiente no se presta y los precios aunque no son costosos en su mayoría sentimos que en relación a lo que te sirven nada que ver, los cocteles estuvieron mejor pero no del otro mundo, la verdad felicitar a los arquitectos, es lo único que tiene de especial, espero mejoren y no sea otro fracaso